5 lecciones de Compliance que nos enseña “El abogado del Lincoln”
En el mundo del Cumplimiento normativo y los sistemas de gestión, la realidad y la ficción tienen algo en común: ambas exigen preparación, ética y capacidad de adaptación.
La serie “El abogado del Lincoln” (Netflix) es el caso perfecto, pese a no ser tan reconocida como Suits.
El abogado de Lincoln nos muestra a Mickey Haller, un abogado tan carismático como perspicaz, que ejerce desde la parte trasera de su Lincoln Navigator y que enfrenta casos complejos en entornos de alta presión.
Si bien sus aventuras transcurren en tribunales, las lecciones que deja son sorprendentemente aplicables a sectores donde las normas UNE, ISO y otras regulaciones exigen precisión y coherencia.
👉 Hablemos de 5 de ellas que ningún Compliance Officer debe pasar por alto.
1. Construir redes de confianza externas para ganar perspectiva
En la serie, Mickey Haller mantiene una amplia red de contactos: desde investigadores privados hasta policías y periodistas. Esta capacidad de apoyarse en fuentes externas le permite acceder a información que sus adversarios ni siquiera consideran.
En entornos regulados (sector aeronáutico, calidad, medioambiente, energía, alimentación o turismo hotelero) no basta con la información interna. La ISO 9001 o la UNE-EN ISO 14001, por ejemplo, destacan la importancia de considerar a las partes interesadas y fuentes externas, de manera que, establecer relaciones con organismos certificadores, consultores independientes o asociaciones sectoriales aporta una visión más amplia y ayuda a anticipar riesgos antes de que se materialicen.
Incluso, a nivel interno, el entorno de compliance envuelve a perfiles muy diversos: administrativos, RRHH, financieros, operaciones o personas con background legal… Aunque no siempre trabajar con algunas personas es sencillo, el cumplimiento normativo necesita de cooperación y concienciación del valor que supone gestionar riesgos, cerrar brechas y tomar decisiones complejas.

Haller nunca llega a un juicio sin tener varios planes alternativos. Anticipa testigos hostiles, evidencias inesperadas y cambios de última hora. Su secreto: escenarios simulados.
Tanto en auditorías, investigaciones sobre el canal de denuncias o en las actividades del trabajo diario, los imprevistos son inevitables. Preparar y actualizar matrices de riesgo personalizadas por tipos penales, así como por departamentos o funciones y realizar simulacros; por ejemplo, de control en impacto ambiental (ISO 14001) o brechas de datos (UNE-EN ISO/IEC 27001) permite actuar con serenidad ante incidentes reales
3. La ética como baluarte bajo presión
Aunque Haller es creativo con sus estrategias, existe una línea ética que no cruza: no traicionar la confianza de sus clientes. En entornos corporativos, la presión de “cerrar el trato” o “cumplir objetivos” puede tentar a tomar atajos.
En Compliance, marcos como ISO 37301 (Sistemas de gestión de Compliance) establecen que la integridad y la transparencia no son negociables.
Incluso, en sectores como el aeronáutico o energía, manipular datos o pasar por alto no conformidades puede derivar en sanciones, pérdida de licencias, aprobaciones o inhabilitaciones.
Por ello, la concienciación y la gestión de tensiones, así como poner el valor el trabajo del personal es crucial y es ahí, donde las habilidades del Compliance Officer marcan la diferencia para fomentar el respecto, la confianza y la lealtad.
No es proteger solo a la organización, es proteger al personal.

En la serie, no todos los casos terminan como Haller espera.
Sin embargo, cada derrota es una oportunidad para replantear estrategias y mejorar su enfoque.
Esta lección nos clarifica que las auditorías internas bajo ISO o UNE no deben verse solo como exámenes, sino como herramientas de mejora continua (ISO 9001:2015 – Cláusula 10).
Documentar incidentes, identificar causas raíz, pedir feedback y actualizar procedimientos es lo que permite que un error no se repita.
5. Adaptarse con agilidad a cambios normativos y del entorno
Cada caso que enfrenta Haller trae giros inesperados: nuevas pruebas, leyes interpretadas de forma distinta, rivales que cambian su estrategia. Su ventaja: adaptarse rápido.
En otros sectores, mencionados anteriormente, como el de la alimentación o el turismo, la legislación cambia con premura, por lo que mantener actualizados los procedimientos documentados, ofrecer formación continua y fomentar la cooperación y la integridad bajo una cultura organizacional basada en la ética, es esencial para cumplir con la normativa vigente.
En Compliance, la capacidad de adaptación y apoyarse en un equipo consultor especializado es la única constante capaz de evitar una crisis reputacional, sanciones u consecuencias para la persona jurídica y diferenciarse de una entidad que sobrevive a una que lidera con el ejemplo.
Conclusión
“El abogado del Lincoln” no es solo entretenimiento; es una metáfora de cómo moverse con inteligencia en entornos regulados.
Como Haller, los profesionales del Compliance, auditoría y consultoría deben cultivar redes, prepararse para lo inesperado, actuar con ética, aprender de los errores y adaptarse con agilidad. En entornos tan regulados con normas UNE, ISO y marcos legales exigentes, estas cinco lecciones son una brújula para navegar con éxito.
En ComplianceCMS trabajamos bajo la excelencia operacional, donde prima la rigurosidad en los detalles, la actualización constante en la aplicación y gestión documental así como el asesoramiento y acompañamiento continuo de nuestros clientes.