La relación entre el cumplimiento normativo y la Inteligencia Artificial es un terreno en constante evolución y los desafíos que enfrentaremos en 2025 y en el futuro son cada vez más complejos, especialmente en lo relativo al ámbito jurídico. El impacto es incuestionable y la regulación de la IA es prácticamente escasa, de hecho existe un reglamento Europeo de la Inteligencia Artificial (AIA) para reducir y limitar los riesgos y mejorar la protección de los usuarios, pero no estará en vigor hasta 2026, por lo que nos deja con un vacío normativo.
Debido a la Inteligencia Artificial, el Compliance enfrenta nuevos retos, ya que las normativas tradicionales deben actualizarse para abordar los nuevos riesgos éticos y legales asociados con el uso de IA, como la discriminación algorítmica, la transparencia en decisiones automatizadas y la protección de datos.
Al mismo tiempo, la IA puede ser una aliada estratégica en el cumplimiento normativo, permitiendo analizar grandes volúmenes de datos, detectar patrones sospechosos y automatizar procesos de auditoría. Las empresas deben equilibrar la innovación tecnológica con un marco ético sólido y su cumplimiento regulatorio.
A continuación encontrarás los 10 retos más importantes a los que se enfrenta tu empresa en esta materia:
- Gobernanza de la IA: Se debe establecer marcos regulatorios claros y efectivos para el desarrollo y uso de la IA, especialmente en áreas sensibles como la toma de decisiones automatizadas y la privacidad.
- Sesgos algorítmicos: Es importante identificar y mitigar los sesgos inherentes en los algoritmos de IA, para garantizar la equidad y evitar la discriminación.
- Transparencia algorítmica: DSe recomienda desarrollar mecanismos para hacer que los algoritmos sean más transparentes y comprensibles, permitiendo a las personas comprender cómo se toman las decisiones que les afectan.
- Privacidad en un mundo de datos: Proteger la privacidad de los datos personales en un entorno donde la recopilación y el análisis de datos son cada vez más comunes, se ha convertido en uno de los mayores retos del futuro, según expertos en ciberseguridad.
- IA Generativa: La rápida evolución de modelos como ChatGPT plantea nuevos desafíos en cuanto a la originalidad, la propiedad intelectual y la desinformación.
- Seguridad de los sistemas de IA: Se debe proteger los sistemas del negocio frente a la IA de posibles ataques cibernéticos y garantizar su integridad. Por ello debemos tener especial cuidado con compartir archivos del negocio que contengan datos y/o nombres con la IA.
- Cumplimiento del RGPD y otras normativas: Es imprescindible adaptar las empresas a las nuevas regulaciones en materia de protección de datos, como el RGPD y a las futuras normativas específicas para la IA.
- IA y Recursos Humanos: Se debe trabajar en garantizar que el uso de la IA no viole los derechos humanos fundamentales, como la libertad de expresión y la no discriminación.
- Impacto en el empleo: Gestionar las consecuencias de la automatización y la IA en el mercado laboral, incluyendo la formación y la reconversión profesional especialmente en empresas de consultoría, y escuelas de formación.
- IA y medioambiente: Se evaluará el impacto ambiental de los sistemas de IA y se desarrollarán soluciones sostenibles.
Cómo afecta la Inteligencia Artificial en el Cumplimiento normativo
En este contexto, vamos a profundizar en 3 áreas imprescindibles que afectan actualmente de manera directa al Compliance y que serán de vital importancia de cara al futuro para la sostenibilidad, transparencia y seguridad de los negocios.
1. Inteligencia Artificial Generativa
- Originalidad y Propiedad Intelectual: Los modelos de lenguaje como ChatGPT son capaces de generar textos sorprendentemente creativos y originales, pero ¿quién es el autor de esos contenidos? ¿Cómo se protegen los derechos de autor cuando una máquina genera obras que parecen humanas? Estas preguntas plantean desafíos legales y éticos complejos, que deben regularse constantemente para evitar plagios y sustracción de información o imágenes privadas.
- Desinformación: La facilidad con la que estos modelos pueden generar textos falsos o engañosos plantea un riesgo significativo para la difusión de la desinformación. La capacidad de distinguir entre contenido generado por humanos y por máquinas se vuelve cada vez más difícil, lo que puede tener graves consecuencias en la sociedad.
2. IA y Derechos Humanos:
- Sesgos y Discriminación: Los algoritmos de IA pueden perpetuar y aumentar los sesgos presentes en los datos con los que son entrenados. Esto puede conllevar que exista una mayor discriminación en áreas como la contratación, la justicia penal y la publicidad.
- Vigilancia Masiva: El uso de la IA en sistemas de vigilancia masiva plantea preocupaciones sobre la privacidad y la libertad individual. Es fundamental establecer límites claros y garantizar que la vigilancia se realice de manera transparente y respetuosa con los derechos humanos.
- Autonomía Humana: La creciente dependencia de la IA puede socavar la autonomía humana y limitar nuestra capacidad para tomar decisiones fundamentadas. Es importante preservar un espacio para las decisiones intangibles y emocionales en un mundo cada vez más automatizado.
IA y Medioambiente:
- Consumo Energético: El entrenamiento y la ejecución de modelos de IA de gran escala requieren una gran cantidad de energía, lo que contribuye al cambio climático. Es necesario desarrollar algoritmos más eficientes y utilizar fuentes de energía renovables.
- Producción de Hardware: La fabricación de los chips y servidores necesarios para ejecutar modelos de IA genera residuos electrónicos y consume recursos naturales. Es fundamental adoptar prácticas de producción más sostenibles.
- Impactos Indirectos: La IA puede tener impactos indirectos en el medioambiente, como la automatización de empleos en sectores que contribuyen a la conservación ambiental o la creación de nuevos productos que generan residuos.
Estas 3 áreas se convertirán en los mayores retos del tejido empresarial en los próximos años en el sector del Cumplimiento Normativo; ya que convergen perfectamente en cualquier tipo de empresa.
Además la protección de datos se considera uno de los factores más importantes en el Compliance, siendo conscientes que un buen desarrollo de un plan de contingencia ayudará a prevenir cualquier tipo de riesgo o peligro que suponga el deterioro tangible o intangible del negocio.